Visita de Monseñor Cona fortalece la fe y la esperanza en la estudiantil de liceo católico de Acajutla
El proyecto «Sembrando Semillas de Esperanza» continúa brindando apoyo a estudiantes salvadoreños, y esta vez fue el turno del Liceo Acajutla en Sonsonate. El pasado jueves 19 de septiembre, Monseñor Luigi Roberto Cona, nuncio apostólico de El Salvador, visitó este centro educativo, siendo recibido con entusiasmo por la comunidad estudiantil y docente.
Cada niño merece una vida mejor para seguir adelante deben tener una buena formación y educación y es esa la semilla de esperanza que se quiere sembrar.
Con banda musical y muestras de alegría, la comunidad del Liceo Acajutla dio la bienvenida a Monseñor Luigi Roberto. La hermana Michel de los Ángeles, directora de la institución, expresó su emoción ante la visita, destacando que esta fortalece la fe y los motiva a seguir trabajando por un futuro mejor. En su mensaje, Monseñor Cona enfatizó que cada niño merece una vida plena y que la educación es la clave para lograrlo. “Cada niño merece una vida mejor para seguir adelante deben tener una buena formación y educación y es esa la semilla de esperanza que se quiere sembrar, afirmó el nuncio apostólico.
Tras el acto de bienvenida, Monseñor Cona compartió palabras de aliento con los estudiantes beneficiados por el proyecto. Silvia Claribel Farfán, madre de familia, expresó su agradecimiento por la iniciativa, destacando la importancia de la salud mental y emocional para romper ciclos de violencia. Rosario de Osegueda, psicóloga, coincidió en que el proyecto es de gran beneficio para la comunidad y espera que se expanda a otras zonas. Por su parte, Roberto Erazo, uno de los estudiantes beneficiados, agradeció a al proyecto por la ayuda a él y a su familia «Agradezco a semillas de esperanza porque nos brinda una mejor educación», expresó el joven.
Para finalizar su visita, Monseñor Luigi y autoridades de la institución se desplazaron a algunas viviendas de familias beneficiadas, llevando palabras de ánimo y bendiciones para sus hogares. Semillas de Esperanza continuara durante todo lo que queda del año visitando más instituciones católicas brindándoles las herramientas necesarias para construir un futuro más prometedor.